Propuesta Nro. 048 / Conversaciones clínicas
[...] Ando tão à flor da pele
Que o meu desejo se confunde
Com a vontade de não ser
Ando tão à flor da pele
Que a minha pele tem o fogo
Do juízo final.
Flor da pele, Zeca Baleiro e Rachell Luz
COWAP Brasil promovió en 2020 varios encuentros online para reflexionar con los profesionales de la salud mental que se encontraban en la primera línea en la lucha contra la violencia doméstica, bajo la influencia de los efectos del COVID-19. En estos encuentros se discutieron diversos aspectos de esta violencia, generando el deseo de organizar, entre los miembros de COWAP Brasil, un grupo permanente para escuchar y acoger a mujeres, adultas y adolescentes, que estaban siendo sometidas, directa e indirectamente, a situaciones de violencia doméstica.
Así nació, en agosto de 2021, el Grupo de Asistencia COWAP Brasil (GAC), con el objetivo de promover la escucha analítica y dar voz al sufrimiento psíquico de estas mujeres víctimas de violencia doméstica en situación de vulnerabilidad social y económica. Analistas didactas y analistas en formación vinculados a COWAP Brasil – IPA hicieron y hacen parte de este grupo de asistencia psicoanalítica gratuita y online.
Ante la creciente necesidad de comunicación, impuesta por el aislamiento social, la pandemia evidenció el teleatendimento como de particular relevancia para toda la comunidad analítica, resaltando la importancia del uso de este instrumento para el mantenimiento del vínculo analítico. El GAC, debido a la extensión del territorio brasileño, así como a la procedencia de la población atendida, las asociaciones y los profesionales de la mayoría de los estados de Brasil, adoptó el teleatendimento como herramienta central de su trabajo.
La estructura de funcionamiento del GAC está inspirada en el método de observación de bebés de Esther Bick, el cual fue creado en 1948, y tiene como objetivo proporcionar a los futuros terapeutas una experiencia de observación con bebés, reconociendo el beneficio de este tipo de vivencia en la formación clínica (Bick, 2018 [1964]). El método Bick se fundamenta en los conceptos teóricos y técnicos del psicoanálisis, en tres tiempos: observar, registrar y discutir en el grupo de supervisión, bajo la coordinación de un psicoanalista experimentado tanto en el método cuanto en la coordinación del funcionamiento grupal.
El observador en el primer tiempo, con una postura no intrusiva, disponible y empática, busca con su presencia viva generar la mínima interferencia posible en la dinámica familiar. En un segundo tiempo, registra todo lo que ocurrió en la observación y en su mente. En el tercer tiempo, el registro se lleva al grupo y junto con el coordinador y con los demás miembros se ejerce la función de contener, sostener y elaborar las angustias arcaicas que la observación puede desencadenar.
Así como en la observación de bebés, verificamos que en la asistencia clínica de emergencia a mujeres víctimas de violencia intrafamiliar se despierta toda una gama de angustias, lo que puede desencadenar en el analista una turbulencia emocional. El GAC está inspirado en la ética subyacente del método Bick, por la importancia del entorno familiar y la presencia viva, no intrusiva, del analista como testigo del dolor psíquico del paciente. En este contexto de asistencia de emergencia de la clínica del trauma, el analista atento a lo que ocurre dentro de su mente considera la identificación proyectiva masiva y la identificación adhesiva de estos pacientes, utilizadas como forma de comunicación primaria.
Carolina, una joven víctima de violación, fue encaminada al GAC para recibir apoyo emocional; cuando denunció al agresor sufrió amenazas de muerte y fueron necesarias medidas de protección para quizás evitar el feminicidio. Tuvo que cambiarse de ciudad y de nombre. Se produjo una inversión de valores, la víctima fue penalizada en lugar de protegida, y tuvo que vivir en la clandestinidad, re-instaurándose el trauma y el terror, en una retraumatización de la situación traumática. De la misma manera como ocurre con las mujeres que son víctimas de parejas o ex parejas violentas, que se ven obligadas a cambiar de estado o de país.
Otra situación, de particular impacto, fue el relato de una de las analistas, con la noticia de que la expareja de su paciente había sido muerta y este agresor, había sido asesinado y desmembrado por narcotraficantes de su barrio. El grupo puede cumplir su función, de ser un espacio de reflexión y continencia a las ansiedades que se despertó en la analista, por la realidad violenta que se le impuso.
En este trabajo con pacientes de clínicas de trauma, la atención a lo que sucede en la mente del analista es parte del campo de la transferencia. Un delicado trabajo, desarrollado en el GAC, en que se mantiene una actitud de escucha empática del dolor, creando un espacio psíquico para traducir, en ocasiones, lo intraducible.
En esta presentación, nos gustaría poner en discusión dos aspectos centrales, derivados de la experiencia del grupo: i. cómo se articula el método de Bick con el trabajo en el ámbito de la violencia intrafamiliar contra la mujer, como es desarrollado en el GAC; ii. cuál es la pertinencia del teleatendimento psicoanalítico, especialmente considerando que este tipo de asistencia psíquica es de naturaleza emergencial.